Encuentro en Tenerife – Comentarios Generales

Comentarios recibidos sobre el viaje en Abril 2003 por Agustín Guimerá, coordinador de la Reunión Anual de la Asociación J. William Fulbright en Tenerife, Semana Santa de ese año.

Carmen López

Hola a todos,

Yo también guardo recuerdos maravillosos de nuestra estancia en Tenerife. Gracias de nuevo Agustín por tu dedicación y entrega y a todos por el buen espíritu de grupo.

En el aeropuerto compramos un drago, el pobre es muy pequeño y necesitará buenos cuidados para sobrevivir, no sé que debo hacer por lo que cualquier sugerencia es válida: tipo de tierra, riego, cuantas veces hay que hablarle al día, etc.

Carmen López

Nota: Agustín le hizo llegar algunos consejos, pues tiene un drago en su casa en Madrid.

Maria Marrero

Yo me he quedado con una sensacion estupenda despues de pasar estos dias con ustedes, esta mañana le decía a Nieves (otra hermana Guimerá) que hubiese pagado por hacerlo. Estoy como llena de energía, esta mañana la única que estaba contenta de empezar el curro era yo, todos mustios, y yo encantada de la vida. Para mi fue de verdad enriquecedor, y no solo desde un punto de vista historico-geografico-cientifico sino sobre todo personal. De verdad las gracias te las tengo que dar a ti por haberme invitado a compartir con los «japoneses» estos dias.

Maria Marrero

Area de Turismo y Paisaje, Cabildo de Tenerife.-

Myriam Álvarez Jaén

Hemos disfrutado y aprendido un montón de historia, vivencias, sensibilidad, naturaleza, arte, botánica, política, cante autóctono, familia, etnografía, poesía…

Hasta pronto Chaaaaaaaaacho (arrástrenlo, como dice Malule).

Myriam Álvarez Jaén

Josefina Alfaro

Queridos amigos/amigas, fauna fulbright:

Respondo como buen «japones» (y que me perdonen las feministas) al saludo electronico de nuestro lider y tomo parte de este foro recien inaugurado, que nos puede ayudar a adormecer el mono del viaje. Una vez mas Agustin te has superado y no solo nos has hecho pasar unos dias intensos y llenos de amistad, sino que tambien nos ofreces la oportunidad de mitigar las posibles secuelas psicologicas de una vuelta «subita» al trabajo diario. Mi mejor recuerdo para todos vosotros.

Josefina Alfaro

Carmen Uceda y Baldomero Rubio

Para todos los que nos hemos encontrado cada día puntualmente en nuestra querida guagua:

Hasta ahora no he sabido exactamente que estoy asociado en un grupo de personas tan maravillosas que han hecho posible esta aventura tan emocionante de Tenerife. Desde ahora estoy incondicionalmente con todos vosotros. Han sido unos días de placer y emoción inolvidables. Es difícil resumir un conjunto tan amplio de sensaciones tan variadas. Quiero destacar mi afecto por la encantadora maestra rural de Anaga, preocupada por el destino de los niños del entorno, y sus dificultades para encontrar un sitio más allá de los bosques que los vieron nacer. Y la alegría que en cada reencuentro Agustín trasmitía a toda la familia. -¿Estáis todos y todas?- Y la simpatía de María, que con tan buen humor nos hablaba de los «golpes gomeros». Y tantas cosas…

Muchas gracias:

Carmen Uceda y Baldomero Rubio

Marisol Bravo

HUMBOLDT se sienta en el concierto de María Novillos y Manuel Ariza

Dos son la razones por las que me siento a escribir estas líneas: la primera es unirme al Foro Tenerife 2003 que primero GIL y después AGUSTIN han convocado; la segunda es el explicar el titulo que encabeza este mensaje.

Empiezo con una anécdota que bien puede resumir el encuentro en Tenerife. JORGE PARDO preguntaba a su madre cuando íbamos a dejar de aprender y empezar a divertirnos. El niño, en su primer encuentro Fulbright, captó perfectamente que este viaje Fulbright, al igual que otros anteriores, estaba siendo una experiencia de aprendizaje que era, en su conocimiento, perfectamente diferenciable de la de diversión y juego. No he podido dejar de reflexionar sobre esta cuestión y me he preguntado -y os pregunto- en qué momento de nuestro crecimiento empezamos a fundir estos dos conceptos; es decir, desde cuando aprender y disfrutar se manifiestan como una vivencia única y una emoción difícil de describir. Porque para mí, amigos del encuentro Fulbright de Tenerife, este viaje ha sido una maravillosa experiencia de aprendizaje en las que AGUSTÍN, nos ha introducido en la mitología, la leyenda, la biología, la ciencia, la poesía, el arte, la historia, al tiempo que ha ampliado nuestra experiencia sensitiva halagando nuestra vista, oído, olfato y, sobretodo, nuestro gusto.

Esta alegría por el conocer y el experimentar no es solamente una vivencia personal; y de ello dio prueba la emoción que nos embargó a todos cuando IGNACIO TORMO hablaba en el acto de clausura en el Casino de Santa Cruz.

Dejadme que yo también evoque un lugar y unas personas que, a partir de este viaje, han pasado a formar parte de mi memoria: el lugar es el Parque Rural de ANAGA, las personas, por orden en que las fui conociendo, son IGNACIO, CONCHA Y CRISTÓBAL, el director del parque. ANAGA representa el frágil equilibrio entre hombre y naturaleza (sin par). IGNACIO representa la generosidad y la lealtad, CHARO la entrega y CRISTÓBAL el servicio. Con estos mimbres se llega muy lejos, y ellos están haciendo la diferencia. ANAGA y ellos, repito, han empezado a formar parte de mi universo vital.

La segunda razón de estas líneas era la de explicar el significado del titulo de estas líneas. En el último día, a JORGE PARDO le llegó la diversión en la Playa De Las Teresitas; los mayores nos engalanamos para lucirnos en el Casino De Taoro. Con una copa en la mano, charlamos, coreamos a EMILIO (creo que estuviste increíblemente sensual…) y aportamos nuestro granito de arena para incrementar los fondos de la beca Fulbright. Aunque muchos lo intentamos, solamente JAE y yo estuvimos en «racha». JAE y yo hemos decidido que la cosecha de la noche se destinarán a pagar a Mr. HUMBOLDT una entrada en la fila cero del concierto de MARIA NOVILLOS y MANUEL ARIZA: mi recaudación fue de 75 euros. JAE os lo dirá en su mensaje.

Durante el concierto, las notas de violín y piano se entrecruzarán, en mi memoria, con las palabras de HUMBOLDT en boca de AGUSTIN, con la explosión de olores del jardín del Drago Milenario, con el estruendo de olas del Puerto de Santa Cruz, con la experiencia visual del mar de nubes, con las carcajadas a los chistes de VICTOR, EMILIO Y JAVIER y con el calor de la amistad de los amigos del encuentro de Tenerife.

Marisol Bravo

Gil Carbajal

¡ Con este ritmo de pareceres, poesía, y panegíricos tendremos que sacar una edición especial sobre el encuentro de Tenerife!

Gil Carbajal

Eduardo Pérez

No sigáis, por favor, o de lo contrario, ¿quien se va a atrever organizar el próximo encuentro, con el listón puesto por encima del Teide!

Excelente, hasta para los que se «quejaban» de tanto aprender; dos hechos concretos:

  1. El miércoles en el cole de Óscar, en gimnasia, su nuevo equipo buscaba nombre. óscar propuso «los guayotas», nadie le entiende; insiste, «o si no, los diablillos» …
  2. Ayer, con un amigo que se quejaba de lo aburrido de sus vacaciones (por la lluvia), Óscar intenta solidarizarse, pero lo machaca: «las mías también, todo el día de visitas … fuimos a ver un drago milenario, el árbol más antiguo de Europa, … y nos metimos dentro de él»

Eduardo Pérez

Javier

Genial lo de Óscar y el drago.

Yo hace unos minutos contaba lo de «¡Chacho, chaacho, cháaaaacho!» delante de un grancanario, quien se ha quedado admirado de mi pronunciación y entonación (o sea, el arraaaastre). Creo que fui al curso correcto.

Javier

Javier Muñoz

Lo que sigue no pretende ser un relato de actividades, sino que sólo se trata de unos apuntes marginales, en forma de «blog», un tanto extemporáneo y pelín ácrata.

15 de Abril

Nada más llegar, me impacta gravemente observar la tarta turisticoide del Puerto de la Cruz, convenientemente atenuada por la explosión de colores de la primavera canaria. Más tarde caemos — casi literalmente, que la pendiente de la calle es de concurso — unos cuantos por el Café de Paris, donde el amable camarero ni se inmuta cuando le recitamos las diversas advocaciones de café que queremos tomar… que ya se sabe, cien españoles en la barra, cien variedades distintas de café que te piden. ¡Marchandooo…!

Salimos a Icod a ver un árbol viejo, drago pues, que aunque no está en el mismo Bilbao, tiene miles de años a la espalda. Impresionante por su antigüedad, aún me quedo más perplejo cuando me entero de que, en realidad, es casi como una especie de cebolla venida a más. Nos enteramos del reto que representa mantenerlo en razonable estado de salud, a su edad, contra la contaminación y otras agresiones más drásticas. Luego veo, con alivio, que la carretera que pasaba cabe el viejo, según fotos que tenía vistas, ha sido sustituida por un coqueto mini jardín botánico representativo de especies de la tierra.

Agustín activa algún extraño resorte y «Don Júmbolt» empieza a desperezarse en su tumba para acompañarnos. Mola.

Degustamos una excelente tortilla de papas (sólo mejorada por la que hace mi madre, claro), un queso riquísimo, y un vino perfecto para acompañar a ambos, todo ello cortesía del Ayuntamiento de Icod de los Vinos. Desde aquí propongo que a esa tortilla se le haga un lugar en el escudo icodense. Es de justicia.

16 de Abril

Juan José (JuanJosé@wawa.cabildo.tf, supongo) nos empieza a impresionar por su habilidad y aplomo. Afortunadamente, porque en la carretera que sube no paro de ver capillitas de cuneta memento de accidentes pasados. Que las tengo vistas también por Galicia. Fotografío una a la salida de la piscifactoría.

Alucinado me quedo con los brezos del lugar, la «erica arborea». Concluyo que en esta generosa tierra plantas un tomillo y cuando te quieres dar cuenta te lo encuentras como árbol de 20 metros.

Don Júmbolt se termina de despejar y reclama su espacio en la wawa. Curioso nombre: «Alexander Don Júmbolt» ¿No sería más normal «Don Alexander Júmbolt»? Cosas de los antiguos, supongo.

No llevo cremas solares, indisciplinado como yo soy. Pero no importa, al final del día estamos todos exactamente igual de colorados, los que se aplicaron factor 120 como los que nada de nada de nada. Ni siquiera la ceja irónica, que está más expuesta debido a su mayor altitud, se me ha quemado más que la otra.

Andando por aquellos inhóspitos parajes volcánicos, me asalta la gran duda: ¿será Malasia un malpaís?

En la terraza de la novena planta nos relajamos unos cuantos, antes de irnos a dormir. Aprovechando el paso de algún ángel, consigo colocar algún chistecillo, en medio de un auténtico recital a cargo de Emilio y Víctor. Este Emilio sí que sabe, consigue que nos riamos casi antes de empezar a contarlo.

17 de Abril

Para compensar la espectral (bien que entrañable) presencia de Don, se nos une, jugando en el equipo del Cabildo, una entidad mucho más corpórea, que se nos presenta en forma de María. La cual viene decidida a dar el callo, pero pronto se percata de que estos japos son muy especiales y se le empiezan a achinar los ojitos. Ahora sigue currando pero además disfruta ¡qué bien!

En la Casa del Vino, puede que yo haya sido el único japonés que se ha visto la exposición de la pintora sueca amiga de Asunción Guimerá (no sé si me saldría el cariñoso alias con el que se la conoce en familia — mejor no me arriesgo). Compro vino del de ayer en Icod, que es el que más me ha gustado hasta ahora. Y también se me viene a las manos un sacacorchos deluxe, que el mío llevaba dos semanas roto y ya no sabía a qué taller llevarlo. Mejor así, me digo, y lo compro.

La comida me deja aletargado por unos minutos, pero no llega a doblegar mi curiosidad y prescindo de la meditación, los ojos bien abiertos todo el camino.

En La Laguna vamos a ver los monumentos de Semana Santa. ¿Cómo, que no están hechos de miga de pan forrada, o quizá frotada, de Albal? Pues yo juraría que se lo oí a alguien, porque soñarlo no, que no lo he soñado. Apuesto algo a que lo deslizó en mi oreja ese guasoncete de Guayota, o algún primo suyo. ¡Cuando todo el mundo sabe que están construidos en «papier mâché»!

Uno del grupo retrata a un penitente confesando sus miserias directamente a las alturas, por celular. O tempora, o mores!

Por segunda noche consecutiva vamos unos cuantos a la novena. Emilio no está hoy, pero Víctor acepta el reto en solitario y la velada no decae lo más mínimo. Pido «lo de siempre» y el camarero, sin pestañear, me aporta una weissbier, como ayer. Epatado quedo.

18 de Abril

Anaga. La niebla, a sotavento de una ladera, dibuja con precisión todas las turbulencias que ahí se producen. Es lo más mágico que llevo visto en todo el viaje. Bajo a tierra temporalmente, gracias al tentempié que trae Ignacio, pero a continuación nos internamos en el monte por el húmedo sendero, lo que restablece la magia. Fotografío las endémicas violetas de Anaga, que realmente parecen orquídeas diminutas.

Camino de Taganana y regreso, si no llega a ser por ir en manos de San Juan José, no habríamos tenido arrestos para disfrutar tanto del espectacular paisaje. ¡Torero, torero…!

19 de Abril

Santa Cruz. Bonito y relajado el paseo, se agradece después de unos días tan intensos. El acto de clausura en el Casino de Tenerife resulta muy emotivo. Al bajar, en un rellano de la escalera del Casino descubro un cuadro que retrata un fragmento de fachada de, inequívocamente, una de las torres mudéjares de Teruel, lo que me hace reconectar con el encuentro Fulbright en Albarracín. Bienvenido el «ritornello».

Casino Taoro. Después de mucho forcejeo conseguimos que Guglielmo salga a bailar. Luego sabríamos que ni con mucho forcejeo conseguiríamos sacarlo de la pista. Cerró con el local. Me alegro. De arte de Miriam ya sabíamos, pero me enternecía contemplar a Christiane también hincando diente a las sevillanas, con esa mirada de persona feliz que le salía. ¡Olé!

20 de Abril

La megafonía del autocar que nos lleva a Los Rodeos me saca del ensueño de casi una semana. La amable señorita declama con el tono de las azafatas que han dicho diezmil veces lo de las salidas de emergencia y los chalecos salvavidas. Nada que ver con «nuestra» wawa.

Aún sigo dando vueltas a lo de Malasia (¿o era Malvásia, como las papas que se usan para arrugar coladas de mojos?)

¡Señor, qué vida la del japonés sobrevenido!

Javier Muñoz

Jose Manuel Pardo

¡¡¡ Ya no puedo aguantar mas !!!! ¡Tengo que decir algo después del viaje, y aún más, de los mensajes recibidos!

Resulta que además de ser los japoneses unos compañeros de viaje inigualables, resulta que escriben unas crónicas, poesías, impresiones etc. Dignos de escritores de renombre ¿Habeis leído los textos de Javier, de Marisol y de Agustín, solo por mencionar algunos?. Habeis conseguido que todavía hoy JUEVES, siga recordando agradablemente nuestra excursión a la isla «SECRETA» de Santa Cruz de Tenerife.

No puedo seguir sin dar mis más sinceras y efusivas gracias a todos los que han hecho el viaje posible: Agustín y todos sus lacayos, que estaban increiblemente encantados de atendernos ¿Cómo es posible eso? .Pues porque todo lo que rezuma Agustín en forma de saber, amabilidad, entusiasmo, optimismo, amistad, le ha llegado también a los lacayos, y los lacayos responden con la misma moneda hacia Agustín y hacia todos nosotros que hemos tenido la suerte de «pegarnos» al mismo. Gracias Agustín y gracias también a Mariano y a Eduardo que han estado ahí ocupándose de todo. Y gracias, también , como padre de familia, a todos , por haberos hecho cargo de nuestros niños. Todos habeis aportado algo para que ellos lo hayan pasado bien y no hayan dado la lata más de lo soportable.

Y ahora mis impresiones:

15 de Abril

No recordaba ya la playa de arena negra de algunas partes de la isla, y sobre todo de Santa Cruz, parece salida de una historia de otro planeta y es increíble que no te manches con ella. Parece una especie de carbón. Aguas pegando a las rocas negras (parece una película en blanco y negro). Segunda sorpresa, jardín al lado del Drago. Yo conocía al Drago, pero esto era otra cosa, esto era un paseo por un jardín exótico, lleno de plantas aparentemente salvajes y a la vez bellas.

Tercera sorpresa: Entramos en un restaurante «con paredes azul añil» y nos invitan a vino y pinchos, en especial la tortilla. Y ¿qué vino blanco es éste? Está buenísimo Y yo me digo, ¿qué he hecho yo para merecer esto?

16 de Abril

Viaje alegre y jovial acompañado de Agustín y de Humboldt. Y Humbold realmente nos acompañaba, pues hablaba casi más que Agustín. Siguiente sorpresa, un Instituto Astrofísico digno solo de países avanzados, ¡ Y además desarrollando tecnología propia! ¡Y he podido ver al sol en directo! ¿Quién había visto antes al sol así?.

Siguiente susto: un montón de lagartos corriendo de aquí para allá. ¡Seguro que los habían puesto allí para que los viéramos nosotros y después los recogían a toque de trompeta! De las cañadas, nada que decir, no por más conocidas menos asombrosas, pero en el año 83, cuando yo estuve la única vez anterior ¡No había vegetación! ¡ Enhorabuena chacho! ¿Y qué decir del mar de nubes? El mar que sólo puede verse cuando se sube a la alta montaña. ¿Alguién se ha preguntado alguna vez por qué los montañeros aguerridos se aventuran con montañas de miles de metros, jugándose la vida? Me temo que tiene que ver con la paz del mar de nubes. Y, de repente, casi sin solución de continuidad, nos metemos en una zona de tormenta, niebla y lluvia. Si no lo veo no lo creo.

17 de Abril

Amabilidad de María y sorpresa por las casas de la Orotava. ¡Estas sí que no las conocía! ¿y el Sauzal? ¿y su biblioteca? ¿visteis allí los libros escritos por Agustín? ¿y el lagar? ¿y los nísperos y tomatitos rojos (alguien ha mencionado ya el nombre) ? ¿y la ermita? ¿y el restaurante?– ¿ quién inventó el cocido madrileño?. Pero luego descubro algo que no sospechaba, la Sociedad Económica de Amigos de Tenerife. ¡Resulta que es muy antigua y liberal y defensora de la cultura, y yo sin enterarme! Sobre todo mi impresión positiva de calor cuando hable con uno de los que nos recibieron (el médico, no era el que habló, era otro que estaba alli) – era una explosión de amistad, bondad y humanidad todo junto (y eso que hablamos de política). Y después los retablos de plata. Yo estoy seguro que no son de plata, no pueden serlo, valdrían una fortura, además ¿cómo podrían colocarse de esa manera? sólo son de plata los de los pasos, porque se ven de cerca. Me llamó la atención el fervoroso júbilo de la gente de la Laguna en la Semana Santa.

18 de Abril

Ya lo dije en el Casino. Es lo que más me gustó. Una mezcla de miedo (a la niebla y a lo desconocido) calor , por el amable relato de los guías, aventura (cuando nos metimos en el bosque) y magia (cuando llegó Agustín y dijo: ¡ Nubes, que hemos llegado, moveros hacia la izquierda ! Y las nubes se movieron y nos dejaron a la vista la costa de Taganaga) parecía que la película del Señor de los Anillos se había inspirado aquí. Bueno, el sin fín de sensaciones, con el final del la playa en blanco y negro golpeada por las olas hizo el resto. ¿Qué calladito se lo tenía Agustín?

19 de Abril

De nuevo, la visita al Mencey, a las placientes tortuguitas, a los hotelitos de Santa Cruz, a los arbolitos «ficus benjamina», a la plaza de los azulejos (no es casuaalidad que Agustín sea biznieto de quien es) y para rematar, un expléndido museo diseñado y ejecutado con nuevas tecnologías que no tiene nada que envidiar a los mejores del mundo ¡ yo también soy canario!! ¡Bueno, que no hemos terminado, para los viejos verdes, no nos vino nada mal el pase de esculturas por la playa, es-cultura claro!

Antepenúltima sorpresa, el Casino de Tenerife se convierte en un improvisado ¿ustedes creen en realidad que fue improvisado? cierre de excursión con una tertulia al estilo Fulbright, donde casi todos nos emocionamos. La última sorpresa fue la cara mundana del Casino de Taoro. Los canarios también son humanos. Me llamó la atención esa señora de mediana edad que estaba jugando a la vez a la ruleta y la black-jack y le faltaba tiempo para perder todo el dinero (que seguramente no tenía).

Gracias por todo:

Jose Manuel Pardo

Mª Carmen Llorens, Ignacio Tormo.

Tras regresar de nuestro primer viaje con la asociación y ya inmersos con nuestras ocupaciones habituales, queremos transmitirte nuestra efusiva felicitación y nuestro agradecimiento por los inolvidables días que hemos pasado en Tenerife, que te rogamos hagas extensivo a Maite, al Presidente, Tesorero y Junta Directiva de la asociación, al Cabildo de Tenerife y a todos y cada una de las personas que han posibilitado esta experiencia entrañable e inolvidable.

Entre tantas cosas positivas a destacar, en nuestra modesta opinión, el calor humano “marcó la principal diferencia”, con innumerables y siempre positivos matices de contenido y de persona y fue lo que más valoramos, comenzando por el líder, cuñado de Humboldt y seguido por su equipo de “followers” colaboradores en distintos ámbitos y situaciones, y acompañado de un incomparable grupo de “japoneses”.

Un recuerdo muy especial para los niños y su excelente comportamiento: “chapeau” para ellos y para los papás.

A destacar, Charo y su entusiasmo contagioso cuando nos explicaba sus vivencias de las escuelas rurales de Anaga; Maria estupenda y cariñosa en todo; Juan José chofer excepcional; Ignacio de Anaga; el matrimonio Zarate y su mansión de La Orotava; la finca de S. José con sus vivencias especiales, las cañadas y etc..

Aprendimos tanto y tan diverso, que ahora tenemos que hacer inventario y digerirlo. Fue variado y rico: historia, poesía, antropología, astrofísica, biología, agricultura, vinos, gastronomía, economía, política y otros.

Tenerife ha dado un salto de gigante desde mis visitas a la isla hace más de 30 años, en plan de trabajo. Felicidades a los tinerfeños y al Cabildo.

Menos favorable: El destrozo del Valle de La Orotava y del Puerto de la Cruz.

Sugerencias para próximos viajes: tratar de tener en cuenta a los que estamos alejados de Madrid, para facilitar nuestra participación, que no queremos perdérnosla.

Saludos y abrazos para todos:

Mª Carmen Llorens, Ignacio Tormo.

Pilar Manzano

Hola a todos,

Me cuesta mucho escribir este mensaje después de los agradecimientos tan bonitos que habeis escrito algunos de vosotros (María, Marisol, Javier y muchos otros). Sólo quiero decir que después del fabuloso viaje a la «isla de Agustín», estos mensajes hacen mucho más agradable la vuelta al trabajo.

Agradezco mucho a Agustín y a sus colaboradores la organización del viaje, en que no se ha olvidado ningún detalle. Además, como madre de uno de los niños, no puedo pasar por alto las atenciones especiales que se han tenido con ellos (guías y acompañantes dedicados, juegos en la playa, mucha paciencia y todo tipo de atenciones).

Como ya estamos acostumbrados en este grupo, el viaje ha sido una maravilla.

Pilar Manzano.

Christiane Fertig

I just livened up my morning in the office by reading your delightful travelogue of our Tenerife escapade. It’s so difficult to let the memories calm down and to concentrate on the actual work here…

In fact, my tomato complexion has attenuated a little by now and even won envious looks of a few colleagues of mine here. If I had returned as a patata arrugada this would have been less entertaining .

Christiane Fertig

Emilio Vilaró

Teniendo un día mas para estar por las islas, visité Icod de los Vinos, Garachico, Masca y los Gigantes. Luego La Gomera…Teneis una tierra preciosa.

Y como el mosaico que os envio.. hecho com 1200 imagenes sacadas de los encuentros, lo que mas me gustó fue el conjunto, nada sobra y nada falta, todo encaja.

Para mi pintura he necesitado del blanco de los quesos, del verde de los bosques, del rojo de tus vinos,pero sobre todo de tu cariño para montarlo todo.

Cuando miro las imagenes usadas, veo a Nelson, a Manrique, al Teide, a los cactus, a muchos amigos, a las comidas y copas … pero por mucho que lo busco, a Humboldt no lo veo.

Como todo mosaico, este se puede hacer de diversas piezas, en otro orden, otro día. Si este rompecabezas un dia se te desbarata, y lo quieres reconstruir, avisa, me tendras a tu lado, tijera en mano para recortar de tu bosque los mejores colores, el gofio y el vino nos las ayudaran a pegar…. silba como en la Gomera o con el llamado de los crios en el autocar, que veras que de esta Peninsula muchas piezas muy deprisita a tus puertas volveremos a llamar.

Emilio Vilaró

Marian

El lunes, día 20,me dirigía a las 7.30 de la mañana a mi trabajo, desde Salamanca a Zamora, después de unos días de ejercer de `japonesa´, bajo la guía, acogida y las alas de un tierno y sabio palomo rabiche isleño y junto al resto de la fauna fulbright. Me sentía, raramente a esas horas, despierta y muy contenta. En el viaje de vuelta , iba mentalmente dándoos las gracias a Agustín, a Maite y a todos los demás, y recordando escenas, gestos, olores ´sabores…sensaciones y momentos varios de nuestro breve e intenso viaje. Sin embargo, no me puse a escribir; por una parte, mi pequeño guayota reclamaba toda mi atención, después de algunos días sin verme y, además, quería dejar reposar mis impresiones por temor a caer en el sentimentalismo.

A lo largo de la semana , he ido comprobando que compartíamos un mismo espíritu ( «a Fulbright-Humboldt spirit?») y que ese espíritu seguía flotando entre nuestros quehaceres diarios, rutinarios. ¡Que hermosas las palabras de todos y cada uno de vosotros, qué preciosas las reflexiones de Mª Sol, la poesía de Javier, cuánto cariño en los comentarios y el mosaico de Emilio, en las anécdotas sobre los niños, qué entusiasmo transmiten las aportaciones de Carmen, cuánto agradecimiento en las palabras de Pilar, de Guglielmo, de Christiane, de Carmen y Baldomero, de Josefina y de todos los demás! ¡Qué feliz sensación de compartir!

A la vuelta he revisado un poema de una de mis autoras preferidas, la poeta americana Emily Dickinson, y quiero compartirlo con vosotros :

    Ah, Teneriffe!
    Retreating Mountain!
    Purples of Ages- pause for you-
    Sunset- reviews her Sapphire Regiment-
    Day- drops you her Red Adieu!

    Still - Clad in your Mail of ices_
    Thigh of Granite- and thew- of Steel-
    Heedless- alike- of pomp- or parting

    Ah, Teneriffe!
    I`m kneeling - still -

    1863
    1863

También he recordado a Dulce Mª Loynaz, exquisita y cultìsima isleña de otros lares y sus escritos sobre Tenerife. Os recomiendo su lectura.

Estamos todas? Chacho! Pero la cabra no, ¿Estará con Humboldt?

Maria de los Angeles de Vicente (Marian)

Víctor Valverde

Hola a todos desde Valladolid, antigua capital del Imperio, que la «gota» de Felipe II nos arrebató, al motivar al rey a trasladar la corte a tierras más benignas para su enfermedad (o sea, a Madrid). Quién me iba a decir a mi que me iba a perder todas las tertulias, conciertos y demás acontecimientos Fulbright por culpa de la gota de nuestro antiguo monarca. Ya que perdimos la capitalidad, podía haberlo sido por un motivo con algo más de glamour -puñetas!- , pero en fin, qué se le va a hacer.

Escribo únicamente para dar las gracias:

  • A Agustín por su esfuerzo organizativo: si montar una simple conferencia supone una carga de estrés importante (cualquiera que haya tenido la experiencia lo sabe), armar un encuentro como el de Tenerife, tan perfecto y sincronizado, hace merecedor a su organizador de un sitio – forrado en plata – en los altares de las iglesias de la Laguna. Mil gracias de nuevo por tan fabulosa organización. Especialmente, y eso creo que fue percibido por todos, por el calor humano que siempre estuvo presente: tanto de Agustín, como de todos sus colaboradores que en plena Semana Santa estuvieron a disposición de los japoneses (Santa Madre de Dios, esperemos no haberles cargado con una cruz demasiado pesada!).
  • A todos los compañeros de viaje que hicieron del encuentro una experiencia fabulosa, tanto durante como después del mismo (el más difícil todavía), atenuando el shock postraumático de la vuelta al trabajo con correos que a más de uno nos han hecho abrir la boca, pasmados ante la facilidad literaria, fotográfica, y comunicativa que algunos compañeros Fulbrighters demuestran.
  • Finalmente (quiero ser breve: ya sabéis que en los «Oscar» de este año el tiempo de agradecimientos estaba limitadísimo, y no quiero que me interrumpa la orquesta) a W. J. Fulbright, culpable último de que uno se sienta privilegiado de pertenecer a un grupo con una calidad humana que se desborda por todos los lados. Muchas gracias Senador.

Víctor Valverde